De repente te das cuenta de que mientras lees estás llorando

Algo curioso que me ha ocurrido leyendo es que me entrego al 100% en lo que tengo entre manos. He reído, me he enfadado con los personajes, he sentido indiferencia por la trama e incluso he llorado.

La primera vez que me pasó fue con El niño con el pijama de rayas, después de haber sido el único que no salió de la sala del cine llorando como si acabase el mundo pensé que o estaba muerto por dentro porque no sentí nada en toda la película o que estaba rodeado de blandengues en ese momento.

Como estaba casi convencido de que era la primera opción ya que por lo general soy bastante frío, decidí comprar el libro al día siguiente y cuando lo leí fue todo distinto.

Con este libro lloré de tristeza y rabia a la vez, tristeza por el final (previsible por el tema del que trata el libro) no solo de los niños sino también de todas las personas que como Shmuel vestían pijama de rayas y de rabia por la injusticia que tuvieron que vivir todas aquellas personas que asesinaron los nazis en esa época.

Nota: 8

Publicación original: 15 de octubre de 2017 a las 01:31:11